GameBlog semanal #260, repaso a lo jugado en 2025

¡Bienvenidos al GameBlog semanal, en este caso el #260! El anterior lo tenéis por aquí, si hay curiosidad.

Continuamos una vez más por la costumbre iniciada en 2021, que seguimos tanto en 2022 como en 2023 y 2024. Repasaré todos los videojuegos completados este 2025, ¡y no es una lista precisamente corta!

Videojuegos completados en 2025

Los dividiremos por meses, situando cada título según el momento en que lo completé. Para hacerlo más interesante, pondré la imagen del mejor juego de cada mes según mis preferencias personales. No contaré las rejugadas en dicha competición, dando preferencia a los nuevos. ¡Así le daremos algo de chispa!

Las reseñas u opiniones extendidas de cada juego (si es que dejé constancia de ellas en la web), las encontraréis enlazadas en sus respectivos nombres.

Enero

Ghost of Tsushima: no esperaba que me gustase tanto, pero así fue, a pesar de que me parece sencillo en su combate. Me gustó mucho la historia y el protagonista, además de que lo sentí bastante divertido: acabé completándolo al 100%.

Blade Chimera: siendo de Ladybug, me imaginaba un buen metroidvania y así fue, ágil a los mandos y con buenos jefazos. De ese tipo de juegos cortos e intensos que sientan muy bien.

Catherine: Full Body: en concreto la ruta de Katherine. Aunque prefiero a la rubia porque me pareció más entretenida, la pareja original sigue siendo interesante. Y la jugabilidad de subir por bloques es una genialidad, guste más o menos.

Alienation: experiencia cooperativa de disparos en perspectiva isométrica al que iba echando partidas desde el año pasado. No está mal y puede jugarse a solas, pero de esa forma se vuelve repetitivo.

Left 4 Dead 2: la clásica experiencia de disparos en primera persona a la que sí había jugado, pero no completado todos sus niveles hasta ahora, que lo hice con amigos.

The Shell Part III: Paradiso: el final de la trilogía de novelas visuales que siguen al detective Tokisaka. Fue interesante hasta el final y considero que aquí tenemos los mejores casos e investigación. Quise saber más de algunos personajes y me dejaron con las ganas, pero en general, una maravilla de obra y conclusión para su trilogía.

Febrero

Tales of Graces F Remastered: buen regreso para un JRPG bastante clásico en su historia, con personajes no tan inspirados como otros de su saga. Por suerte, es muy entretenido en sus combates y como remasterización cumple genial. Eso sí, admito que esperaba bastante más de la trama.

Dynasty Warriors: Origins: no paré con el juego hasta que completé todos sus finales y exploré el 100% de su contenido. Una pasada de experiencia, audiovisualmente espectacular y divertidísimo; lleva los musou al siguiente nivel. Totalmente imprescindible para mi gusto.

Warriors: Abyss: un musou/roguelite que se lanzó como propuesta menor y «fanservice» con muchos de los personajes de Koei Tecmo. Un vicio durante unas cuantas horas para engancharte con tus personajes favoritos de Dynasty y Samurai Warriors, así como otros títulos como las protagonistas de Atelier, pero tampoco va más allá en ninguno de sus apartados.

Avowed: RPG de Obsidian que para mí fue una decepción. Tiene buenas bases y detalles muy interesantes, pero no desarrolla su potencial y queda algo básico en varios aspectos. Parece hecho sin ganas en ciertos puntos. Una pena, porque bajo el paraguas de Microsoft y tras un retraso, esperaba que firmasen su obra maestra de la generación. Y no lo fue, ni de lejos.

Marzo

Yakuza 0: marzo fue un mes donde jugué mucho y gran parte del tiempo se lo llevó esta saga. Tras intentarlo en el pasado y nunca conseguir que me motivase, por fin logró conquistarme esta aventura de Goro y Kiryu. ¡Y es muy, muy bueno!

Yakuza Kiwami: a este no le costó nada engancharme y quizá sea de mis favoritos. Muy buen ritmo, una historia y personajes interesantes, acción desenfrenada con el bueno de Kiryu… Lo único que me disgustó fue el trato de ciertos secundarios y la conclusión de su antagonista. Por lo demás, brutal.

Yakuza Kiwami 2: aunque entretenido y potente en ciertos aspectos, admito que no me atrapó tanto como el anterior. La trama y sus personajes me parecieron irregulares esta vez, pero eso sí, me encantaron las misiones extra de esta versión Kiwami con Goro Majima.

Beyond the Ice Palace II: atractiva propuesta de plataformas y acción, por ese orden, aunque tiene un potencial en su premisa narrativa que apenas se aprovecha. De todas formas, se ve bonito si te gusta el estilo retro y se juega bien. Otro cortito de los que te dejan satisfecho.

Like a Dragon: Pirate Yakuza in Hawaii: quizá sea una experiencia desenfadada en su historia, pero la aventura pirata de Goro me parece especialmente divertida. Lo pasé en grande completando todas las secundarias y combatiendo junto a la tripulación. Como guinda del pastel, la recta final de su trama sí me pareció una maravilla narrativa con excelentes detalles para los amantes de la saga y del protagonista que nos ocupa.

Like a Dragon Gaiden: The Man Who Erased His Name: un capítulo muy interesante de la vida de Kiryu tras Yakuza 6. Me parece imprescindible para cualquier fan del personaje. Es breve, pero muy intenso, bastante divertido de completar y toda la experiencia te hace encariñarte todavía más con este icónico protagonista.

Tribe Nine: por estas fechasacabé la primera ronda de contenido de este JRPG gacha y tenía detalles que me gustaban mucho, pese a que otros (su jugabilidad y progresión) no me convencían demasiado. Su historia y personajes tomaban un rumbo muy atractivo. Por desgracia, el siguiente parche fue ya el último… y nos dejaron con las ganas.

Mass Effect 2 (rejugado): retomando la partida en máxima dificultad que dejé a medias ni recuerdo en qué momento. El caso es que quería conseguir su platino en PlayStation y eso hice. Una experiencia perfecta, como siempre en esta saga. ¡Y eso que a mí no me gustan mucho los «shooter»!

Bleach Rebirth of Souls: muy buena experiencia de lucha que homenajea a este anime y en realidad, tiene mayor calidad que la mayoría de cosas que Bandai Namco dedica a este tipo de licencias. Podría haber sido mejor, sin duda, pero ofrece mecánicas originales y un buen juego para fans de Bleach. En resumen, que si te gusta la serie, vale la pena.

Mass Effect 3 (rejugado): mi favorito de su saga, tan emotivo como de costumbre. Aquí completé mi camino en máxima dificultad para el platino y fue todo un lujo. Es más fácil que su precuela, pero lo agradecí porque lo que más disfruto es su historia.

Abril

The First Berserker: Khazan: lo empecé sin grandes expectativas, ya que su demo me quitó un poco las ganas de jugarlo. ¡Menos mal que lo hice! Mi «souls» favorito, porque es una experiencia tan desafiante como divertida a los mandos. Me encanta la estética, tiene una buena historia y su protagonista me gusta muchísimo. ¡Me lo jugué dos veces este año!

Crisis Core -Final Fantasy VII- Reunion (rejugado): no recuerdo qué me llevó a experimentar por enésima vez la aventura de Zack, ¡pero eso hice! Y la disfruté tanto como siempre, en especial con este buen remaster. Un Final Fantasy al año no hace daño.

South of Midnight: una decepción. Me llamaba mucho la atención por su precioso apartado visual, pero jugablemente lo sentí mediocre y su historia es tan corta como superficial. O así lo vi yo, soy consciente de que no es una opinión popular. Por lo menos es breve, unas ocho horas… pero se me hizo largo.

Mandragora: Whispers of the Witch Tree: indie metroidvania-souls en desplazamiento lateral, bastante sólido en la mayoría de sus aspectos. Los «souls 2D» suelen gustarme y este no es la excepción, contando además con una historia decente y una curiosa apuesta visual 3D.

Mayo

The Hundred Line -Last Defense Academy-: el GOTY. Sin duda, un grandísimo juego donde se nota que sus creadores soltaron todo lo que tenían. Personajes geniales y una trama que se divide según tus decisiones. Algunos caminos gustarán más que otros, pero para mí el final verdadero es el mejor y por el que vale la pena vivir todo este viaje tan increíble.

Clair Obscur: Expedition 33: experiencia agridulce para mí. Me gusta su historia, pero no toda me parece brillante y lo que más destacaría es su antagonista y los finales. ¡Y la música! La jugabilidad me parece interesante, pero no para un sistema de combate por turnos; es más bien un sistema de combate por bloqueos. Sensaciones mixta para mí, pero eso sí, es un juego especial.

Chrono Trigger: ¡por fin experimenté este clasicazo! Jugablemente es muy, muy bueno para su época. La historia quedó algo más limitada en cuestión de desarrollo de personajes, pero con sus múltiples finales y todo el conjunto, entiendo a la perfección que sea uno de los JRPG más alabados.

Junio

Danganronpa 2: Goodbye Despair (rejugado): intenté reconciliarme con mi menos favorito de la saga y en parte lo conseguí. Sin dejar de ver sus defectos, logré apreciar mejor las virtudes y valorarlo por lo que es, pese a las cosas que no me convencen. Y que viva Nagito Komaeda.

Danganronpa Another Episode: Ultra Despair Girls (rejugado): ya que estaba con el «modo Dangan» puesto, aproveché para volver a experimentar la aventura de Komaru Naegi. Ya me gustaba de antes y reconfirmé esa opinión. El infravalorado de la saga, sin lugar a dudas.

Ys X Nordics (rejugado): tocaba rejugar en máxima dificultad para sacar su (pesado) trofeo de platino y eso hice. Salté las escenas de historia, que ya me la sabía (y tampoco me apasiona). Por suerte, jugarlo es tan divertido como cualquier título de esta maravillosa saga. Gran dúo el de Adol y Karja.

Julio

Persona 5: The Phantom X: jugué todo lo que ofrecía de salida y bueno, pues… ahí está, con sus virtudes y defectos. Al fin y al cabo, es un gacha, con todo lo que ello conlleva. Las mazmorras acabaron haciéndoseme pesadas y sus mecánicas de progresión me hicieron dejarlo de lado. Una pena, porque los personajes estaban bien e incluso empecé a dedicarle espacio en la web con la primera parte de su historia. Pero en fin, aborté la misión.

Raidou Remastered: The Mystery of the Soulless Army: buen juego con este remaster, apostando por la acción en la fórmula clásica de Shin Megami Tensei, que suele ser de turnos. Eso sí, no me aportó gran cosa al presentar una historia que me pareció sosa, con jefes demasiado insípidos para mi gusto.

Ys Memorie: The Oath in Felghana: regresando al que era uno de mis Ys favoritos con una remasterización cumplidora, sin más. El juego como tal me parece un imprescindible para los fan de Adol, por supuesto.

Robotic;Notes Elite/DaSH: el dúo de novelas principales de las Science Adventures que me faltaban. Quizá sean mis menos favoritas de la saga, pero es algo subjetivo; rinden muy buen nivel narrativo y la protagonizan personajes entrañables y bien desarrollados. Y bueno, vi a Nae y Daru con unos cuantos años más encima. Ya solo por eso último me valía la pena.

Agosto

Xenoblade Chronicles X Definitive Edition: llevaba tiempo queriendo rejugar mi entrega favorita de Xenoblade y lo hice en esta versión, que además incluye un nuevo capítulo final y más contenido. El juego tiene sus cosas, pero yo lo disfruté mucho y creo que su estructura tenía potencial para seguir mejorándose y utilizándose en hipotéticas secuelas.

Guardianes de la Noche -Kimetsu no Yaiba- Las Crónicas de Hinokami (rejugado): preparándome para su secuela, le di un repaso rápido a la historia de su primera entrega. Audiovisualmente espectacular, sencillito a nivel jugable.

Fate/Samurai Remannt DLC: tenía pendiente la expansión de tres DLC. Me encantó volver con Iori y Saber, me divirtió mucho jugar las nuevas aventuras y me gustaron las nuevas incorporaciones, en especial Zhao Yun. Me encanta este juego.

Lost Records: Bloom & Rage: lo bueno de esta historia es que sus cuatro protagonistas se notan bien trabajadas, así como las interacciones entre ellas y el cuidado de las decisiones que podemos tomar para influir en sus relaciones. ¿Lo malo? Que a mí la historia general no me pareció gran cosa, desaprovechando su toque sobrenatural y dejándome algo frío al final.

Steins;Gate: Linear Bounded Phenogram: spin-off que tenía pendiente de terminar. Son once historias, unas mejores que otras, pero la mayoría valen la pena y hay alguna muy, muy buena. Me encantaron las dedicadas a Okabe, Suzuha, Mayuri, Luka y Nae, pero en especial la de Moeka.

Donkey Kong Bananza: estuvo fuera de mi zona de confort al ser un plataformas de recolección, pero lo disfruté bastante a pesar de ello. Un juego potente, fresco y original, muy Nintendo, apropiado para darle la bienvenida a Switch 2.

Tsukihime -A piece of blue glass moon-: primera parte del remake de la mítica novela visual. A mí me gustó mucho, especialmente por el dúo de chicas protagonistas y algunos secundarios interesantes. Pero lo siento incompleto, me falta contenido importante sobre Shiki y compañía. ¡Espero encontrarlo en la futura segunda parte y que esta mejore en retrospectiva!

Melty Blood: Type Lumina: juego de lucha del universo Tsukihime, sorprendentemente bien hecho, muy entretenido y con la Saber de Fate/stay night en el plantel de luchadores. ¡Me lo pasé mejor de lo que esperaba!

The Rogue Prince of Persia: ya lo adelanté en su acceso anticipado el año pasado, ¡pero les quedó un roguelite muy compentente! Me gustó mucho superar el contenido principal, su fórmula engancha y lo veo como otro gran acierto del regreso de Prince of Persia junto a Lost Crown. Una pena que no estén haciendo mucho ruido, porque calidad no les falta y merecen su reconocimiento.

Guardianes de la Noche -Kimetsu no Yaiba- Las Crónicas de Hinokami 2: la evolución natural del primer juego, una secuela muy continuista con más personajes pero no mucho contenido más allá del juego online. Admito que esperaba un poco más en sus opciones jugables. La historia es audiovisualmente espectacular, igual que la precuela.

Septiembre

Fate/stay night Remastered: descubriendo por fin la que es quizá la novela visual más popular del género y confirmando que tiene su fama bien merecida. Tendrá detalles que me gusten algo menos, pero en su conjunto fue muy memorable, en especial su última ruta. ¡Esa fue maravillosa! Y me abrió las puertas para las adaptaciones anime, la precuela y otros contenidos, muchos de ellos creados por ufotable. Vale la pena.

Marvel’s Spider-Man Remasterizado: el original fue de mis favoritos de 2018, pero nunca había jugado la remasterización ni los DLC, así que aproveché para hacerlo y sacarle el trofeo platino de PlayStation. En fin, juegazo increíble e imprescindible para cualquier fan de Peter Parker.

Ender Magnolia: Bloom in the Mist: secuela del sorprendente Ender Lilies, mejorando la fórmula de su predecesor, aunque cambiando un poco la temática de su ambientación. Me parece un juegazo, de los mejores metroidvania.

Danganronpa V3: Killing Harmony (rejugado): me encantó volver a jugarlo y recordar porqué me gustó tanto en su día. Esta vez viví el final con una perspectiva más tolerante, intentando sacarle también sus detalles positivos. Un juego muy potente dentro del género, aunque arriesgado en esa última parte.

Octubre

Hades II: sin paliativos, el mejor roguelite que he jugado hasta la fecha. Su primera parte ya fue muy buena, pero aquí se superaron en todos los aspectos. Divertidísimo, adictivo, precioso, con personajes carismáticos, una adaptación interesante de la mitología griega… Imprescindible. Lo jugué buena parte en portátil con Nintendo Switch 2 y no me arrepiento en absoluto.

Death end re;Quest: Code Z: decepcionante hasta el punto de dejarme alg otriste. Ignoro qué necesidad había de este título en una saga que era fresca y original en su género. Es un spin-off, así que ojalá no vuelvan a repetir esta fórmula en ningún sentido, y si lo hacen que lo aprovechen bien. La lías cada vez que sales, Ripuka.

Digimon Story: Time Stranger: gran juego dedicado a este maravilloso universo, mejorando en varios aspectos al dúo de títulos que ya tenía su saga. Cualquier fan de Digimon y de este entretenimiento tiene el deber moral de probarlo, ¡he dicho!

Ghost of Yotei: experiencia obligatoria para cualquiera que le gustase Tsushima. No sigue su historia, pero le rinde un gran homenaje y mejora su fórmula. Todo un gozo para quien le guste la temática japonesa de samurais y compañía. De lo mejor entre los exclusivos de PlayStation.

Leyendas Pokémon Z-A: buen juego de la saga, muy agradable si en su día fuiste jugador de X e Y. Lo mejor fue el combate, con una propuesta distinta y divertida que le da un toque fresco muy necesario. Como juego no creo que sea mejor que el de Arceus, pero sí que vale la pena.

Jotunnslayer: Hordes of Hel: roguelite de supervivencia de hordas, o como se llame el género que popularizó Vampire Survivors. Este no está mal, tiene una buena base y entretiene, pero lo vi falto de contenido en comparación a otros que prefiero, como Halls of Torment.

Danganronpa: Trigger Happy Havoc (rejugado): de mis novelas visuales favoritas, mucho mejor trabajada de lo que muchos creen, con unos personajes sólidos y casos con buen valor narrativo.

Noviembre

Tales of Xillia Remastered: cumplidor relanzamiento de, para mí, uno de los mejores Tales of. Lo disfruté muchísimo una vez más, primero con Jude y más adelante tocará rejugar con Milla. ¿Cuántas veces habré completado esta aventura? ¿Cuándo sacará Bandai Namco la necesaria remasterización de su segunda parte?

Ninja Gaiden 4: juegazo imprescindible para los fans del hack and slash. Me sorprendió porque me pareció el mejor y más adictivo de su saga, con un combate espectacular, buena ambientación y un protagonista acorde.

Hyrule Warriors: La era del destierro: un muy buen juego de acción que sobre el papel, soluciona las carencias de su precuela (el apartado técnico y un control ocasionalmente impreciso). Se ve y se juega genial, pero es cierto que la historia me parece desaprovechada y eché en falta batallas a mayor escala. A veces no parece un musou. Aun así, tiene encanto y es un placer completarlo.

Fate/hollow ataraxia: novela visual spin-off muy «fanservice», una especie de «secuela» de Stay night cuya historia principal me gustó bastante, pero es un 25% del juego frente a un 75% de escenas demasiado insustanciales para mi gusto. Eso sí, tiene contenido de valor sobre varios Servants como Rider, Caster y Lancer.

Dungeons & Dragons: Neverwinter Nights 2 Enhanced Edition: disfruté muchísimo de mi regreso a esta aventura y especialmente gocé la expansión Mask of the Betrayer. Viendo lo fluido que funciona y que por lo menos yo no sufro errores, agradezco bastante que le dedicasen esta versión «mejorada». Un clásico de mi época.

Dungeons & Dragons: Dark Alliance (rejugado): me lo pasé varias veces en PC, pero tenía una partida a medias en PlayStation y decidí terminarla. Un juego que esperé mucho en su día, para acabar encontrándome un producto que… en fin. Por no decir que sus responsables nos mintieron bastante. Pero siempre intento mirar el lado positivo y aquí es controlar a Wulfgar. Es el único lugar donde poder hacerlo y, por suerte, su estilo de combate consiguieron representarlo bastante bien. Y con eso me quedo: a aporrear trasgos con Aegis-fang.

Diciembre

Shuten Order: novela visual con potencial de ser muy top en su género, llena de personajes carismáticos y grandes momentos. Para mí, lo que la aleja del podio es su final, que echa a perder la generosa y potente construcción previa. Sin embargo, eso no quita la genial aventura vivida junto a Rei.

Octopath Traveler 0: aventura JRPG más larga y maravillosa de lo que esperaba gracias a sus nuevas mecánicas y los geniales villanos que prácticamente protagonizan su historia. Quedé bastante contento; esperaba que me gustase, pero no que lo acabase considerando quizá el mejor de su saga.

Granblue Fantasy: Relink: ¿cuándo se supone que se da por completado este juego? No recuerdo exactamente en qué momento terminé su historia y el «capítulo 0», pero lo pondré aquí para que conste. Todavía sigo haciendo misiones de vez en cuando y me debe quedar contenido para el platino. Un ARPG muy divertido que solo flaquea en el tema narrativo.

Videojuegos pendientes

Jugué y jugué, como podéis comprobar, pero todavía quedaron títulos pendientes. De hecho, este año llegué a sentir algo de frustración al ver que salían tantos que me interesaban y no poder permitirme comprar o jugar todos lo que querría. Entre ellos, los «sacrificios» fueron…

• Ninja Gaiden: Ragebound: pasó algo curioso con este y Shinobi. Salían con un mes de diferencia, probé ambas demos y los dos me gustaron. Quería decidirme solo por uno y dejar el otro para más adelante… El caso es que la indecisión me duró todo el mes de lanzamiento de Ragebound, salió Shinobi y yo todavía seguía con la incertidumbre.
• Shinobi: Art of Vengeance: al llegar este iba a comprármelo, pero de pronto me dieron más ganas del Ninja Gaiden y volví a dudar, porque había estado reprimiéndome todo ese mes. En resumen, ambos se quedaron en la tienda y yo sin ellos. Y así concluye una historia estúpida que acabó dejándome pendientes los dos juegos que quería y, de paso, me hace quedar como un idiota.
• Absolum: beat’em up y roguelike se unen para ofrecer una experiencia que, según dicen, está muy bien. Me lo creo, porque en su día probé la demo y me encantó lo que jugué. En cuanto coincidan el tiempo y las ganas, me lanzaré. Y tiene opción a cooperativo, para quien le interese.
• Tainted Grail: Fall of Avalon: un RPG muy estilo Skyrim, pero en una interpretación oscura de la mitología artúrica. La demo me gustó mucho y me apetecía lanzarme, pero las circunstancias fueron privándome de las ocasiones en las que me apetecía y podía permitírmelo. Al final ahí quedó, como uno de los que algún día debería jugar, ¡y es que la aventura completa tiene muy buena pinta!
• Final Fantasy Tactics – The Ivalice Chronicles: es raro en mí que deje pasar un Final Fantasy, pero la remasterización a primera vista no me convence mucho por el precio que vale. No tengo ninguna prisa, ya lo rebajarán. A día de hoy sigo con la quinta entrega en tareas pendientes, por lo que quizá tarde un poco en lanzarme a por este.
• Trails in the Sky 1st Chapter: decidí ahorrarme temporalmente este remake, porque la saga es larguísima y estoy seguro de que continuarán sacando juegos. En un año de tantos juegos y gastos, y siendo esta aventura una tan extensa, decidí darle un tiempo de ventaja. Ya me pondré al día cuando esté por salir el siguiente remake.

Quizá me olvide alguno, porque fueron demasiados. Como veis, la mayoría fue por ahorrar, aunque me arrepiento de no haberme lanzado a por los Ninja y Shinobi, que obviamente son mi estilo de juego. Probablemente sean esos los que acabe jugando antes de esta lista, seguido por el Tainted Grail. Los otros dos ya caerán cuando estén baratos.

¡Felices fiestas a todos!