Danganronpa V3: Killing Harmony, la conclusión de su saga
Llegó el momento de hablar sobre Danganronpa V3: Killing Harmony, el videojuego que culmina los títulos principales de la saga. Nos ofrecen otra gran historia en una novela visual muy entretenida y bien lograda. Ya os adelanto que es una experiencia bastante recomendable, pero desaconsejable para iniciarse en este universo.
Si nunca habéis jugado la saga, os sugiero visitar esta entrada donde indico mejor dónde comenzar. Por ahora, empezaré esta valoración aclarando lo primero que se os puede venir a la mente al ver el tercer juego. ¡Y sin destripes!
¿Es una secuela?

En esencia, sí. Killing Harmony se sitúa tras los acontecimientos sucedidos en el resto de juegos y series de su universo. Cuenta una historia en el mismo mundo, obedeciendo la estructura de los títulos principales: 16 jóvenes atrapados y obligados a asesinarse entre ellos. Sin embargo, nadie debería pensar que es una continuación de las otras tramas en sentido literal.
Nos tocará investigar los crímenes que van sucediendo junto al protagonista de turno, descubriendo algunos de los familiares misterios de la saga… Y otros que no tanto. Si habéis jugado a los títulos de estos desarrolladores, ya estaréis habituados a la expresividad personal que muestran durante sus propios videojuegos. Unos expertos en derribar constantemente la cuarta pared.
Danganronpa V3: Killing Harmony resulta bastante especial en este sentido, así que ningún fan de su universo debería saltárselo. ¿Recordáis esas escenas y diálogos «fuera de la trama principal» habitualmente protagonizados por Monokuma? Aquí no son tan recurrentes como en Goodbye Despair. Pero sí más impactantes y significativos.
Las aventuras de Makoto y compañía finalizan oficialmente en los anime de Danganronpa 3. En este juego viviremos otra historia, con personajes y enigmas distintos. Pero no lo toméis como una experiencia independiente; contiene infinitos spoiler de entregas anteriores.
Otra gran historia

Donde no falla Killing Harmony es en la forma de presentarnos a los personajes y contarnos su trama. Tras el (en mi opinión) bajón narrativo de Danganronpa 2, aquí vuelve la calidad hasta sus cotas más altas. Y no es que este juego nos narre la historia más profunda y enrevesada, o tenga los personajes mejor hechos del mundo.
Se trata una vez más del buen hacer de sus escritores. Nuestra aventura siempre mantiene un gran ritmo de acontecimientos sabiendo cuando poner misterios sobre la mesa, desarrollar a sus personajes y utilizar a otros como herramientas para algún fin. En esta ocasión la trama está muy bien cuidada, nunca se hace pesada y se siente detallista.
Eso también se aplica a los casos de asesinato, los juicios y las escenas del día a día entre los mismos. Vamos desentrañando la historia de la mejor forma, siempre dejándonos con ganas de más. Se gestionan muy bien esos momentos donde ponernos la miel en los labios tras un giro del argumento, a la par que se disfruta de las escenas más tranquilas, útiles para desarrollar a los protagonistas.
Porque sí, Danganronpa V3 no podría funcionar sin una notable selección de estudiantes para participar en su típico juego mortal. No puede ser sencillo tener 16 grandes protagonistas, tanto por la cantidad como por el hecho de que varios de ellos morirán relativamente pronto. Pero Killing Harmony logra darle profundidad a la mayoría. Incluso los que menos duran tienen mucho valor.
La mejor jugabilidad

A pesar de tratarse de una novela visual, la saga Danganronpa ofrece una jugabilidad bastante activa durante sus aventuras principales. Por suerte, esta entrega recoge lo mejor de las dos anteriores y añade algunos conceptos nuevos para dotarla de mayor interés. Vuelven varias mecánicas, más pulidas que nunca para disfrutarlas al máximo.
Los controles durante la exploración/investigación mejoraron bastante, agilizándola. Además, el juego reduce mucho el número de objetos banales a examinar, centrándose en lo verdaderamente importante. Al gestionar mejor los escenarios que van abriéndose, la sensación de repetitividad que antes podía generarse ahora apenas se percibe.
También se eleva la calidad de lo más atractivo a nivel jugable: sus juicios. Viniendo de los otros títulos nos sentiremos como en casa, pues ya conoceremos bien sus mecánicas. Pero se nota la mejoría de las menos pulidas, como los «debates con espada». Y se incorpora una nueva opción interesante para los debates: ¡mentir!
Como es obvio, los mini-juegos de lógica habituales volverán a estar presentes, aunque con toques distintos. No sabría decir si aciertan en todos, pues yo por ejemplo veía más interesante algún otro de antaño. En cualquier caso, cumplen bien para ofrecer una propuesta fresca mientras pensamos cómo resolver cada misterio.
Modos extra

Todos los títulos principales de Danganronpa cuentan con un modo extra que te permite seguir conociendo a los personajes que no te dio tiempo a explorar en el juego principal, todo ello sin la presión de la trama y los asesinatos. Killing Harmony no es una excepción y vuelven a ofrecernos lo mismo, con las típicas citas y eventos fan-service.
Este juego, sumado a eso, incluye dos mini-juegos más donde echar horas. En uno de ellos elegiremos al personaje que queramos entre los 16 protagonistas y tendremos que ir mejorándolo en una suerte de juego de tablero. Durante el mismo, adquiriremos habilidades e iremos viendo eventos que nos cruzan con personajes de títulos anteriores.
Todo ello sirve para disfrutar del último modo; un juego estilo dungeon crawler donde nuestro objetivo será superar 50 pisos llenos de enemigos hasta alcanzar el jefe final. Podremos lograrlo eligiendo un grupo de cuatro estudiantes importados de la anterior actividad. La verdad es que suena bastante bien, y más para ser actividades extra…
Pero lo cierto es que se siente torpe, repetitivo y poco fluido. Tampoco ayuda la exigencia de invertir demasiado tiempo en desbloquear y mejorar a varios personajes. Al final, lo que más vale la pena es presenciar las interacciones entre protagonistas de distintos juegos… la mayoría anecdóticas.

Valoración final
90/100
Puede que la historia de Hope’s Peak Hight School acabase de forma canónica… pero yo necesitaba esto. Danganronpa V3: Killing Harmony trae una interesantísima novela visual que me mantuvo enganchado durante más de cuarenta horas. Una jugabilidad muy fluida unida a una todavía mejor historia son las claves de su éxito. Con la gran colaboración de sus personajes, la mayoría bastante entrañables.
La entrega que nos ocupa sabe ver sus fallos y debilidades anteriores, resolviéndolos casi todos para ofrecer objetivamente su mejor aventura. Aunque en mi corazón es difícil reemplazar al primer Danganronpa. Aun así, considero que Killing Harmony resulta un producto mejor a nivel del género. Quizá en el futuro escriba más entradas, profundizando con spoiler.
No incluyo en la valoración los mini-juegos extra, pues son añadidos que algunos agradecerán y otros considerarán innecesarios. Yo me situaría entre ambas posiciones… algo que me hace apreciar poco el spin-off de puro «fanservice» que incluye Decadence. Lo que más importa es la experiencia de su historia principal y eso lo han bordado, poniéndole un broche de oro a su saga.
Como siempre, es necesario dominar el inglés para disfrutar al máximo de la trama y los juegos de lógica. Seguro que en este punto ya lo sabéis de sobra. Es una pena que la saga no venga traducida oficialmente al español, pues podría experimentarla muchísima más gente.