Corazón Sombrío en Baldur’s Gate 3, las dos caras de la Luna
Completadas un par de partidas con decisiones distintas y pasado el tiempo prudencial para digerirlas, me apetecía hablar de la trayectoria de Corazón Sombrío en Baldur’s Gate 3. Y es que nuestra Shadowheart es de los personajes que reciben mayor atención en el juego, así que no se me ocurría mejor compañera con la que empezar estas entradas.
Aquí vamos a repasar las andanzas de Corazón Sombrío desde el inicio hasta el final, comentándoos mi opinión de las situaciones más importantes en las que se ve involucrada. Por ello, esperad todo tipo de SPOILERS sobre el personaje. Si todavía no jugasteis la aventura entera o queréis leer otro tipo de contenido de Baldur’s Gate 3…
Valoración Baldur’s Gate 3
Aspectos mejorables del juego
Crítica a la historia con Spoilers
Top de compañeros favoritos
La misión de Shadowheart

La Dama Shar me encomendó una misión tan secreta, que renuncié a gran parte de mi memoria para proteger lo que sabía.
Ya sea encarnando a Corazón Sombrío o llevándola de compañera, su misión principal será portar el Prisma hasta su madre superiora en Puerta de Baldur. La tarea no es sencilla, pues antes de que la capturasen en el nautiloide, ella y los suyos robaron el artefacto de los githyanki a costa de la vida de su grupo. Si me preguntáis a mí, parece un milagro que todavía lo conserve.
Tras eso, tampoco le espera un viaje sencillo de vuelta a su viejo templo. Le tocará seguir esquivando a los peligrosos githyanki, con una de ellas en el grupo, a la par que lidia con el renacuajo que amenaza con convertirla en un monstruo. Y todo eso guiada únicamente por su astucia y la fe ciega en Shar, ya que ella no lo recuerda todo sobre si misma.
Con ese contexto presente, el personaje de Corazón Sombrío me parece muy interesante y bien construido. A pesar de su actitud recelosa y desconfiada, con acciones teñidas de pragmatismo, no se la percibe como una mala persona. De hecho, su predilección por ciertos gestos orientados a la bondad nos dan pistas de su verdadera naturaleza… igual que la dolorosa reacción de la maldición de su mano.
Leyendo entre líneas, mientras avanzamos y conocemos a la semielfa, nos damos cuenta de que es una joven muy perdida, guiada y sostenida por una fe inestable. Ella se desvive por la misión, pero si existen los estímulos adecuados para sembrarle dudas, su resolución se siente quebradiza. A fin de cuentas, su voluntad está artificialmente ligada a dicha tarea.
¿La Elegida de Shar?

Se ha hecho el sacrificio final. Ahora soy la mano derecha de la Dama Shar. Todo ha merecido la pena: cada paso, cada prueba, cada gota de sangre…
Creo que el verdadero impacto y los mejores tramos de Corazón Sombrío empiezan en el segundo acto. ¡Y no es para menos, con toda esa influencia del Plano de las Sombras de Shar! Las pruebas de su diosa que superamos en el templo, la información recopilada y las expresiones de la semielfa son muy reveladoras de lo que le depara al personaje.
El momento álgido lo tenemos ante la revelación de Aylin y la decisión de nuestra compañera a la hora de cumplir su supuesto destino… o buscar las respuestas que tanto ansía. Me parece muy significativo que Corazón Sombrío, sin nuestra influencia, decida perdonar la vida a la aasimar solo para obtener respuestas sobre su pasado. Esto muestra que su aparente seguridad y fe en su diosa no era tan sólida.
Aun así, si la joven hunde la lanza en el corazón de la hija de Selune, estamos ante su verdadera e inevitable conversión al bando de Shar, sirviéndola ciegamente como Verdugo Oscuro. Y eso se acentúa con la influencia directa de la diosa en sus recuerdos, volviéndose nuestra compañera cada vez más comprometida con la deidad. A fin de cuentas, evoluciona en la fanática que antes solo parecía ser.
A pesar de que mantiene su esencia, sentimos como poco a poco Corazón Sombrío pierde su individualidad en favor de los designios de Shar. Es un destino trágico a la par que poético, pues no hace más que convertirse en una herramienta similar a la madre superiora, a la que más adelante destronará en Puerta de Baldur. Siempre aprecio que los personajes tengan este tipo de desenlaces dramáticos entre sus posibilidades.
Sacerdotisa de Selune

Aún puedo sentir el Plano Sombrío sobre mí… Aún escucho sus palabras en mi oído. Me siento… sucia.
Si Aylin sobrevive, Shar castiga a su sacerdotisa por abandonar la misión divina y la semielfa queda casi libre de su influencia… pero sigue tan o más perdida que al principio. Antes avanzaba aferrándose a su fe y lo justificaba todo con esa excusa. Ahora, con un camino nuevo ante ella y la bendición de Selune (una deidad que hasta ahora creía despreciar), la joven debe afrontar el nuevo desafío.
Su primer paso es cambiarse el peinado, algo que puede parecer menor, pero es un pobre y forzado intento de amoldarse a su nueva senda, encajando genial con la actitud del personaje. Por mucho que su perspectiva y objetivos cambien, sigue siendo Corazón Sombrío. El miedo y la inseguridad la persiguen hasta que hace las paces con su pasado, ya en Puerta de Baldur, reencontrándose con sus padres y tomando esa decisión imposible que le permita pasar página.
El arco de esa Corazón Sombrío «redimida» acaba realmente ahí. Es cuando resuelve ese problema (además del tema ilícido) que puede empezar de verdad a vivir una vida totalmente suya. En el juego base somos incapaces de ver qué hará la semielfa con su nueva libertad, pero por lo menos hemos vivido todo ese buen desarrollo del personaje, ayudándola a dejar de lado una vida llena de mentiras y ser algo más que una herramienta ajena.
Solo tengo una pequeña queja sobre el arco de Selune. Sé que los dioses de los Reinos Olvidados son caprichosos y se tuercen a los designios del que controle la historia en ese momento. Sin embargo, opino que nuestra compañera debía carecer de sus poderes divinos desde que abandona a Shar hasta que se reencuentra con sus padres y acepta esa nueva etapa. Sería lo lógico… aunque entiendo que problemático a nivel jugable.
Su relación con Viconia

No estoy aquí para convencerte, madre. Ya has caído en desgracia a ojos de la Dama Shar.
Hasta este momento y salvando el pequeño apunte de sus poderes, Corazón Sombrío rinde como un excelente personaje. Sin embargo, para mí su recta final en el templo de Shar debió trabajarse más. Se nota demasiado apresurada para ser un momento tan clave de su trama, especialmente por la confrontación con quienes destrozaron su vida. Sí, me refiero a Viconia… pero también a Shar.
La madre superiora tiene un papel vital para la trama fuera de cámaras; es Viconia quien organiza la misión para conseguir el Prisma, un artefacto esencial para nuestra supervivencia y los actos posteriores. Por parte de Corazón Sombrío, también es la persona que la corrompió y manipuló durante años para cometer actos atroces y dedicarse a actuar en contra de los deseos de su propia familia. Esto último por mandato de Shar.
Teniendo todo eso en cuenta, opino que el intercambio y los diálogos entre la semielfa y Viconia son escasos. Carecen de la pasión y los siento muy forzados, como si quisieran acabar rápido con el tema. Y no debería ser así. Quizá nos sirva para la ruta del Verdugo Oscuro, donde Corazón Sombrío solo sigue los designios de su diosa y no se cuestiona la necesidad de quitar a su antigua superior de la ecuación.
Sin embargo, siguiendo la senda de Selune, nuestra compañera debería tener una visión más amplia del asunto. Viconia es la culpable de gran parte de sus males, pero ella sabe perfectamente que lo hizo por voluntad de la propia Shar. Echo de menos ver muchos más rencores saliendo a flote en esas escenas, así como la opción de buscar un camino alternativo para Viconia. En vez de eso, al final a la joven le resulta indiferente el destino de la drow. Tal resolución me parece muy triste y desafortunada.
Conclusiones

Es apropiado en cierto modo. Para proyectar una sombra, se necesita un poco de luz.
Sé que podríamos profundizar más en el personaje y hablar de otros aspectos de su personalidad, romance o su interesante relación con Lae’zel, pero aquí quise centrarme en su trayectoria. Y pese a que me gusta mucho durante la mayor parte de la historia, opino que debieron afinar ese último tramo. No solo por la propia Corazón Sombrío; bajo mi punto de vista, ningunean a Viconia de forma gratuita por el camino.
La alternativa trágica de nuestra sacerdotisa volviéndose una herramienta de Shar está mejor lograda, triste pero realista. Aunque en dicha vía sigo teniendo algún reproche, como el hecho de que podamos convencer fácilmente a tantos sectarios de abandonar a Viconia. En cualquier caso, mis quejas sobre la cuestionable adaptación de los personajes antiguos son otra historia.
Resumiéndolo, la buena de Shadowheart no dejará a nadie indiferente y acapara una atención más que merecida. Los aciertos con su personaje suelen eclipsar los errores que a mi juicio cometieron al final de su arco. Pero claro, esa es mi opinión, ¡que a mí me duele mucho lo que tocan de Viconia! En líneas generales, estamos ante una genial compañera. ¡De las mejores de Baldur’s Gate 3!
Quizá dedique otra entrada para profundizar en mi opinión sobre el trato a viejos héroes de los juegos originales, incluida la drow que tanto mencioné por aquí. Hasta entonces, si queréis leerme opinar sobre la antigua Viconia…
La verdad es que tener una diosa que te manda a matar a su antigua suma sacerdotisa porque sí, sin que haya hecho nada, pues en fin, dentro de unos años hará lo mismo contigo no? Lo lógico habría sido que volviera a casa como la gran favorita y se reuniera con Viconia. Y siendo de Selune pues lo mismo, si tenemos en cuenta que es la única «madre» que ha conocido debería ser mucho más emotiva a la hora de despedirse de ella o matarla, vamos, que al menos le importara algo. La cosa era dejar mal a Viconia, no hay más. Terribles escenas.
Vaya una entrada de la prota del juego :V