Nexomon: Extinction, ¿mejor que Pokémon?

Pues hace nada que pudimos hacernos con Nexomon: Extinction, de Vewo Interactive y PQube. Su clara inspiración en Pokémon despertó las intrigas de muchos y las ilusiones de otros, entre los que yo me encuentro. ¿Podrá este título tomar las bases de la saga de Game Freak y darle lo que necesita? Con TemTem ya se intentó y solo se logró a medias.

En principio iba a realizar una entrada analizando el juego, y otra comparándolo con Pokémon. Pero me lo he pensado mejor y voy a hacer ambas cosas a la vez. Debo aclarar antes de empezar que yo soy fan de los monstruos de bolsillo originales. No me he perdido ninguna de sus entregas principales y, algunas más y otras menos, me han acabado gustando todas.

La forma de proceder con el análisis será hablando sección por sección sobre lo que ofrece Nexomon: Extinction, el cual recordemos que es un juego indie, en comparación a Pokémon. Para mí, por cierto, lo que menos importa en estos videojuegos son su postgame y su faceta online. Aun así, debemos señalar que esta nueva saga tiene un abundante postgame cazando legendarios, pero carece de opciones online. No he completado lo que viene después de la historia, así que aquí hablaremos exclusivamente de la experiencia en su aventura principal.

¡Análisis en vídeo! Aunque mejor leer…

Apartado audiovisual

Por suerte, Nexomon cumple a un gran nivel. Ofrece un estilo artístico muy bonito, que a mi gusto pega mucho con el tono de la obra. Como es en 2D, al principio podemos ver que su estética puede parecerse bastante a los antiguos Pokémon. Pero a poco que avancemos, o incluso en los primeros minutos, ya vemos que esto no va a ser así. Ya no es solo por los acertados diseños de los Nexomon y los personajes, si no por sus escenarios y las preciosas imágenes que muestran durante algunas escenas de la historia. También los efectos visuales, totalmente acordes y más en un indie.

En cuanto a la música, se mantienen a alto nivel con su banda sonora. Ambienta perfectamente cada situación y tarea del título, no se hace repetitiva e incluso se llegan a disfrutar ciertas piezas por si solas. No podemos decir lo mismo sobre las voces, ya que carece de ellas. Igual que Pokémon, todo hay que decirlo. La diferencia está que a este nuevo título le pega más carecer de voz, por su estética y estilo de juego. La saga de Game Freak, ya incluso en 3D, no tiene esta excusa.

Como último aporte, tenemos Nexomon: Extinction perfectamente traducido al castellano. Esto es un punto muy a favor del juego, cualquiera que controle el idioma podrá disfrutarlo sin reservas. Hay que mencionarlo siempre que sea así, ya que estamos en una época donde no podemos darlo por sentado.

¿Existe ganador aquí?

El apartado en general es muy subjetivo. No puedo alzar a uno sobre el otro. Me gustan ambos, con sus puntos positivos en los dos casos. Las preferencias de cada uno decidirán. Quizá el presupuesto del que dispone Pokémon combinándose con la nostalgia que genera de la saga decante la balanza de muchos.

Arte de Nexomon: Extinction

Historia

Uno de los puntos clave, donde Nexomon: Extinction se ha lucido en mi opinión. Su historia es buenísima, pero ya no tanto por su argumento, que también. Si no por como se cuenta y se vive, entretiene e incluso divierte. Encuentra hueco para detenerse y hacer secundarias, a su vez mantener el interés por la trama con la ambientación. Empieza de lujo y sigue a un gran nivel, optando por ofrecer siempre un tono de humor que le aporta frescura y saca más de una sonrisa. No son chistes pesados ni bromas repetitivas, si no apuntes al propio género y mofas a varias situaciones muy bien traídas. A eso se le añaden giros de guión interesantes y una trama que sabe cuando tomarse en serio y cuando reírse de si misma.

Este apartado suele ser uno de los problemas de Pokémon, donde su competidor en este caso sí ha sabido resolverlo. En las historias de Game Freak la trama es muy secundaria. Sí, teníamos ciertos títulos donde se le daba importancia, como Blanco y Negro, pero su cansina dirección a un público demasiado infantil desvaneció casi todas las oportunidades nuevas con otras generaciones. En la mayoría de juegos la trama era una simple excusa para justificar la aventura, el coleccionismo de Pokémon y vamos tirando rápido al postgame/online. Si te fijabas mucho en la historia, las decepciones y el aburrimiento estaban a la orden del día. Con excepciones, como dije.

También hay que señalar el detalle de los diálogos. Mientras que en este nuevo juego siempre son amenos de leer y aportan mucho a la aventura, en Pokémon no siempre cumplen. De hecho, por lo general en la saga más famosa lo que se dedican a hacer es a ensalzarte absurdamente el 80% de las veces.

Puntazo para Nexomon

Sin duda, aquí Nexomon: Extinction mejora totalmente a la franquicia de la que bebe: eres huérfano y un aspirante a domador del gremio. Estás cerca de lanzarte a la aventura, pero no será tan sencillo. Tanto las escenas iniciales como los sucesos que acontecen en tus primeros pasos te dan pistas de que este viaje no será uno corriente. Los Nexomon no son criaturas adorables a las que acariciar en tus ratos libres. Los humanos de este mundo no se entretienen en halagarte y ayudarte a casa paso. ¿Qué te deparará el camino al horizonte? ¡Una larga historia, muy recomendada!

Personajes

En unos videojuegos donde el protagonista es mudo, los personajes de su mundo son muy importantes a la hora de darle vida. En Pokémon casi siempre estamos solos en nuestra aventura, acompañados de las criaturas que cazamos y poco más. Esto tiene su punto de encanto, interviniendo solo otros personajes en distintos eventos o durante nuestra estancia en las ciudades. Aunque con las últimas entregas casi siempre tenemos a alguien cerca siguiendo el mismo camino de forma más activa, como Lylia o Hop.

Con Nexomon esto cambia de forma muy acertada con nuestro principal aliado, Coco, Él es responsable de los mejores diálogos de la historia y de animar nuestro viaje por este problemático mundo. Siempre está con nosotros y es el encargado de establecer la conexión entre los otros personajes y el mudo protagonista. Aporta buenos comentarios, acompaña genial las escenas y da un toque de humor muy agradable. Es uno de los mayores aciertos de la aventura.

En lo referente a otros personajes, las dos sagas tienen sus buenas aportaciones. Ya hablé sobre los mejores de Pokémon en mi opinión. Como estamos hablando principalmente de Nexomon, podemos decir que la mayoría de ellos son carismáticos y ponen al juego en muy buen lugar. Los antagonistas cumplen bien, algo que es bastante importante cuando se revelan y en las ocasiones en que los enfrentamos. Ninguno decepciona ni aparece más de lo que debería.

Un gran elenco

Una vez más, Nexomon: Extinction estaría por encima. Aunque entiendo que es también algo subjetivo, pero para mí no hay dudas. Un buen acompañante al protagonista mudo ensalza la aventura, como ya me demostraron Midna con Link o Morgana con el Joker. Aquí Coco sobresale, pero los personajes que vas encontrando en tu camino no se quedan atrás. Todos geniales en lo suyo.

Exploración

Pasamos a la jugabilidad y empezamos con una parte fundamental en toda aventura que se precie. La tarea de explorar el mundo que ofrece un videojuego de estas características es importante. Ya no solo por la necesidad de las propias misiones o trama principal, si no ese punto de querer perderte por el mapa u optar por un desvío antes de continuar la historia. Y que valga la pena hacerlo. Encontrar tesoros, desvelar secretos o sencillamente descubrir todo lo que el mapa de la experiencia en cuestión puede ofrecernos.

Aquí Nexomon: Extinction cumple una vez más. Tienes libertad muy pronto en la aventura y dan ganas de explorar desde el principio. Para motivarte aun más a hacerlo, el juego cuenta con muchísimas tareas secundarias que incentivan a ir de un lado a otro, ofreciéndonos de paso situaciones divertidas en estos pequeños eventos. Como no, siendo un nuevo mundo (por lo menos para quien no jugó a su precuela) siempre apetece entretenerte en el mapa para descubrir y capturar a todas las criaturas. El postgame también suma a este apartado.

Además de eso, los típicos entrenadores del camino que te retarán con solo verte tienen una visión bastante limitada y están dispuestos de forma que no tienes por qué cruzarte con ellos. Tú eliges cuando combatir y cuando no. Lo mismo se aplica a las zonas salvajes, donde con excepción de algunas cuevas solo combatirás en las partes de hierba que estén agitándose. Sabiendo esto, nada realmente te priva de explorar a tu antojo, sin interrupciones, y pararte solo cuando te apetezca o necesites combatir. Con excepciones como algunas cuevas o recintos peligrosos.

Eso sí, aunque temprano en la aventura puedes acceder a su sistema de piedras de teletransporte, lo cierto es que en varias ocasiones tendrás que caminar bastante. Teniendo en cuenta que no es un título sencillo, las caminatas de vuelta a centros de sanación están a la orden del día. Puede que alguna vez echemos en falta un buen Pidgey con Vuelo.

Gran mundo para explorar

En mi opinión, Nexomon: Extinction gana una vez más, especialmente por las misiones secundarias. En Pokémon, con el tiempo, nos hemos quedado sin alicientes para recorrer su mundo… y menos con la posibilidad de «atrapar» a sus criaturas intercambiándolas online o en eventos de entrega. Por no mencionar los preciosos paisajes que aporta este indie con su excelente arte.

Combates

Nexomon toma las bases de Pokémon en cuanto a sus batallas, ofreciendo diferentes tipos de criatura y estableciendo un sistema de fortalezas y debilidades. Menos profundo que en la saga de Game Freak, pero suficiente para la aventura que vivimos. Con más de 300 bestias que obtener, existen bastantes representantes de los distintos tipo (no hay híbridos), por lo que es muy probable que cada uno elija a sus favoritos o los que le vayan mejor. Esto hace que los jugadores sientan a su equipo de Nexomon más único y personalizable. Yo prefiero más cantidad por tipo, que menos número de opciones para más tipos.

Cambiamos los clásicos puntos de utilización de cada movimiento (PP) por una barra de energía. Cada habilidad que realizamos gasta cierta cantidad de esa energía, y si la agotamos tendremos que cambiar de criatura o perder un turno recargando una pequeña porción. Esto es muy bueno para incentivar el utilizar más que uno o dos Nexomon entrenados y motiva a contar con un equipo versátil. No solo por eso; aquí las batallas son mucho más duras que en Pokémon y nos obligarán a pensar nuestra táctica. Lo de ahorrar en pociones y éter hay que ir olvidándolo, porque los necesitaremos mucho.

La dificultad de este juego es una realidad. Los niveles de entrenadores (con los que puedes repetir enfrentamientos) y criaturas salvajes van aumentando según avanzas tú. No serán pocas las ocasiones en las que nos veamos superados en nivel por los contrincantes, así que puede que existan situaciones en las que tengamos que entrenar. Y aunque lo hagamos, no nos pondrán las cosas tan fáciles. Gran parte del mérito es la desaparición del relevo gratuito tras derrotar al rival, por lo que cambiar de Nexomon hará que su sustituto empiece por detrás en turnos que el enemigo.

No venimos a pasear

Quizá este es el punto menos discutible: Nexomon: Extinction se lleva la victoria. Las veces que Pokémon ofrecía más que un paseo por el mapa han quedado atrás, y cuando sí existía reto no se valoró como se debía. Muchas estadísticas, movimientos y estados no significan nada si solo están destinados al online. Nexomon tiene menos variedad de movimientos y tipos, pero consigue mucho más con ello que cualquier Pokémon. Su mejor diseño de la aventura para un jugador es incuestionable.

Combate en Nexomon: Extinction

Progresión

Hay que admitir que ahora mismo estamos ante las dos caras opuestas de la moneda. Referente a los Nexomon, nos olvidamos de los IV, EV, naturalezas y demás detalles como la crianza. En vez de eso, solo tendremos que preocuparnos de asignar un «equipo» a cada bestia en forma de cuatro núcleos que otorgan bonificadores y aumentan sus características. Estos o bien los consigues durante la aventura, o los fabricas en el laboratorio con los fragmentos que vas recolectando a lo largo del juego.

La forma de ganar experiencia es venciendo en los combates, como siempre. Pero aquí no se repartirá entre todo el equipo, y se limitará a los participantes del combate vivos tras la batalla. Podemos aumentar los puntos de experiencia ganados en combate si obtenemos ciertos objetos acumulables que suelen ofrecer como recompensa algunas misiones secundarias. Esto también se aplica de forma parecida a, por ejemplo, el precio de las tiendas o el porcentaje de acierto en la captura.

Sobre nuestro propio personaje, no existen unas máquinas ocultas para atravesar obstáculos del mapa que te impedían acceder a otras localizaciones. En vez de eso y por ciertas razones de la historia, adquirimos una serie de poderes que funcionarán para lo mismo, dándonos la posibilidad de explorar otros lugares. Aunque no es algo que se repita tanto como en varios juegos de Pokémon.

Aquí no acumularemos medallas por vencer a líderes de gimnasio. Formamos parte de un gremio de domadores de Nexomon y tenemos un rango y reputación, que vamos subiendo a medida que avanzamos en la trama principal, completamos secundarias y capturamos criaturas. Según nuestro rango, tendremos más beneficios.

Equilibrio por preferencias

En este caso va a gustos, una vez más. Si preguntas por los míos, yo prefiero la opción de Nexomon: Extinction. Nunca he sido amigo de la crianza o el «farmeo», y el concepto de recopilar medallas para ser «el mejor» me aburre. Aquí puede que te obliguen a entrenar para adquirir experiencia, pero se hace en muy poco tiempo y siempre puedes superar los retos con estrategia y objetos utilizables en combate.

¡Hazte con todos!

Que el apartado del coleccionismo de criaturas esté el último no es casualidad. A mí nunca me ha motivado demasiado el hecho de «hacerte con todos». Las cazas de «legendarios» o criaturas destacables son algo más interesantes, pero no va más allá del propio evento, pues tampoco es atractivo utilizar bestias superiores en combates comunes. Pierde la gracia.

Aun así, estamos hablando principalmente de Nexomon y toca comentar este tema. En el juego tenemos un sistema parecido al de Pokémon, pero añadiéndole opciones para que la caza sea más compleja. Atraparemos a los monstruos con diferentes trampas y, antes de lanzarlas, veremos el porcentaje de éxito. Esto se puede subir utilizando las herramientas adecuadas para cada tipo de criatura, ya sea lanzándoles su comida predilecta o utilizando las trampas especiales para su tipo. Sin olvidar lo típico: bajar su vida y aplicarle un estado alterado.

Lo más destacable quizá es que, tras lanzar la trampa, tendremos que pulsar una serie de botones en un orden determinado para aumentar las posibilidades de captura. Esto no asegura la tarea y es donde yo veo el fallo. Hubiese preferido que, si iban a hacer esto, estableciesen los materiales predeterminados para cada caza. Tras esto, una vez atrapado el Nexomon, combatiésemos la resistencia de la presa con esa especie de «quick time event».

Dicho esto, no tengo mucho más que decir al respecto. Quizá para los coleccionistas sí es algo importante y las opciones añadidas aporten interés a la tarea. A mí es una característica nueva que, si bien no me molesta, tampoco me hace preferirlo sobre Pokémon. Así que, ¿cuál es mejor aquí? Dependerá de cada uno. Me faltaría por experimentar el postgame del nuevo juego, que ofrece nuevos retos de caza.

Captura de Nexomon: Extinction

Valoración final

95/100

¿Es Nexomon: Extinction mejor que Pokémon? Pues la realidad es que actualmente sí, sin duda. Lo único que le «falta» es una característica online para combatir con amigos, o eso es lo que yo añadiría. El resto no debería ser necesario. La saga de Game Freak ha perdido parte de su encanto y se ha centrado demasiado en sus características online. En las que además tampoco ofrece un gran servicio, dicho sea de paso.

¿Y si somos más… justos? ¿Nexomon como saga ha superado a la que tiene como modelo, contando juegos antiguos y nuevos? Pues esto es más complicado de responder. Tienen el potencial, y en este momento son una alternativa mejor para muchos de los que nos quejábamos de ciertas características de Pokémon. A mí me ha encantado y no puedo ocultarlo.

Pero sigo recordando grandes experiencias como las de cuarta o séptima generación, y sobretodo la quinta. Nunca entenderé por qué no deciden realizar un juego a la altura, con los recursos actuales y restándole puntos ese tono infantil tan pronunciado. Pensaré que Pokémon simplemente no quiere, porque poder, puede.

Otro gran competidor en el género

Los juegos de Game Freak suelen fallar en su historia, la dificultad y ahora en la falta de exploración interesante que las áreas silvestres no han sabido resolver. No tengo dudas de que, si quisieran, podrían hacerlo muchísimo mejor. Sin embargo en este momento venden igual o más, así que para qué molestarse. La triste realidad es que ahora mismo no están por la labor, por lo que joyas como este Nexomon: Extinction son muy agradables de encontrar. Una sorpresa mayúscula que debe permanecer en la industria.

Sinceramente, le deseo lo mejor a los desarrolladores y tengo ganas de que continúen con esta nueva saga, que ahora ya tiene dos entregas. No solo porque me encantaría disfrutar de más aventuras en este bonito mundo, si no porque así Pokémon quizá consigue espabilar. El tercer Nexomon está en camino, como nos adelantan al final del juego. Quienes amamos los juegos de rol relacionados con las batallas de monstruos estamos de enhorabuena.

Los títulos de Digimon están subiendo el nivel con geniales aportaciones mediante Cyber Sleuth y su inminente Survive, y ahora llegan estos Nexomon. En el apartado online, TemTem intenta aportar lo suyo. Espero que todo eso sea suficiente para que Pokémon consiga dar el enorme salto de calidad que necesita su franquicia; el potencial está ahí. No hay nada mejor que la competencia para motivarse a pisar el acelerador. Ojalá funcione y podamos simplemente elegir la que nos guste más… o disfrutarlas todas.