Impresiones Tower of Fantasy, MMORPG estilo anime

Puede que no fuese mi plan inicial, pero acabé jugando a Tower of Fantasy desde su lanzamiento, así que toca dar mis impresiones de la experiencia. Para quien no lo sepa, es un nuevo videojuego MMORPG free-to-play de mundo abierto con un estilo visual anime que puede recordaros a Genshin Impact.

El parecido no es casualidad y os adelanto que incorpora un sistema de monetización y gacha similar al de miHoyo. Podría seguir aportando comentarios sobre la inspiración que tomó de dicho título, pero creo que adelantaremos faena si os hablo de qué me pareció Tower of Fantasy y prescindimos de casi todas las comparaciones.

Aventuras de mundo abierto

Muchos jugadores son víctimas habituales de propuestas donde, además de la aventura principal, presentan un amplio mapa que recorrer libremente mientras recoges objetos, buscas tesoros o simplemente exploras a tu gusto. El área donde nos permiten jugar ahora mismo todavía no es muy extensa, pero tenemos contenido para rato.

Por ahora mi experiencia en este sentido me parece correcta, si bien no muy profunda. Nos ofrecen un mundo donde realizar todo lo ya mencionado además de meternos en mazmorras, cumplir desafíos o solucionar pequeños puzles, pero de momento nada muy enrevesado. Está por ver lo que vayan añadiendo en el futuro.

La historia principal en si me da una sensación similar. Su trama es entretenida sin más, evita romper el ritmo de juego y de momento tiene sentido. Está lejos de ser el atractivo principal, por lo menos hasta donde yo vi, pero afortunadamente no peca de ambiciosa y ofrece algo sencillo como base para la aventura.

Todavía no tenemos demasiado contenido de lo uno ni lo otro, pues el juego parece planeado para controlar un poco nuestro progreso diario y que los jugadores eviten distanciarse demasiado. Por el momento veo que el potencial está ahí y como mínimo será divertido durante un tiempo.

Acción sencilla y efectiva

Por muy exploradores que nos sintamos, las mecánicas de combate deben funcionar bien si el juego quiere tener éxito. Y desde mi punto de vista, cumplen. Muchos pensarán que emula la fórmula de Genshin Impact de cuatro personajes activos para ir intercambiándolos durante la batalla. La verdad es otra, una no muy distinta.

Aquí, en vez de ir rotando entre personajes, lo que haremos será cambiar de armas. En concreto, entre tres tipos de armas a nuestra elección (de las que dispongamos) para ir alternándolas durante el combate. Cada una tiene su propio estilo de ataque, una habilidad especial y otra extra cuando cargamos sus barras de energía.

Todavía me queda explorar este sistema de batalla, especialmente porque por ahora el juego no resulta un gran desafío en dicho ámbito. Sin embargo, creo que las luchas son suficiente dinámicas. Cada arma tiene su utilidad y aunque no hay demasiada variedad, disponen de elementos y bonos para aprovecharlas de forma individual.

De esa manera, los combates se vuelven entretenidos al principio variando entre las diferentes armas y esquivando ataques, que evitados en el momento justo, ralentizarán a los rivales y rellenarán nuestra energía para seguir atacando. Como dije, los enemigos no suponen necesariamente un reto ni creo que de momento sea su intención.

El temido «gacha»

Soy una de esas personas a las que el sistema de los juegos free-to-play y sus gacha le repelen bastante, para qué os voy a engañar. Creía que era una opinión mayoritaria pero, viendo el éxito de la fórmula, ya no estoy tan seguro. En cualquier caso, este pequeño texto lo escribo para aclararos mi antipatía por ellos.

Afortunadamente, aunque el sistema está ahí y no puedo ignorarlo, parece que podemos avanzar evitando pagar. De una forma similar a lo ocurrido con títulos similares, subsistiremos perfectamente y avanzaremos por el contenido sin mayores problemas evitando gastar un céntimo. Es lo que os recomiendo.

Aquí los personajes invocados en el gacha tienen especial importancia por el arma que traen consigo. Cuantas más tengamos, mayor variedad o más potencia para las que nos salgan repetidas. Pero ahora mismo no es necesario volverse loco con el tema. Como el juego es reciente, tampoco hay mucho por lo que tirar.

Está claro que quien tenga más suerte con las armas y objetos que salgan sacará ventaja sobre otros menos afortunados. Pero creo sinceramente que la competencia en estos juegos es absurda. La gracia del gacha, si tiene alguna, es apañarte con lo que te vaya saliendo y adaptar tu estilo de juego a las opciones que acaben en tu mano.

Ciencia ficción anime

A quien le guste este tipo de gráficos y estilo anime se sentirá como en casa. Su base es sólida: mezclan la típica fantasía con elementos de ciencia ficción para darle un aire futurista al juego. Lo cierto es que funciona, por lo menos a primera vista: el arte es precioso y su mundo parece bastante colorido.

Cuando empecemos a jugar elegiremos entre uno de los dos protagonistas (chico o chica), pero pronto nos permitirán personalizarlo. Esto se hace mediante un editor modesto, aunque con varias opciones para moldearlo a nuestro gusto. Tenemos incluso la opción de adoptar el aspecto de los personajes que vayamos «invocando» en el gacha.

Por lo demás, debo señalar que no estamos ante un producto de la más alta calidad en su propio estilo. Las animaciones de los personajes están bien, pero no tan suaves como podrían ser. Esto se extiende también a los escenarios, con ciertas secciones mejor conseguidas que otras. Afortunadamente, la impresión general es decente.

Mi única pega real en este sentido son esos momentos a la hora de recorrer el mundo, saltando o escalando, que a veces no parecen tan afinados y me gustaría que acabasen retocando. En el resto de aspectos estamos ante un juego bonito y si estás habituado a otros títulos similares, perdonarás fácilmente algunas de sus torpezas aquí.

Conclusiones

De momento, Tower of Fantasy es una experiencia agradable, sin ir más allá de resultar entretenido y disfrutable como producto gratuito, mejor todavía si tienes alguien con quien jugarlo. La opción cooperativa es lo que destaca durante la inevitable comparación con Genshin Impact, pues en el resto de aspectos no queda tan bien parado.

Creo que todavía le queda un largo camino por delante; su competencia es fuerte, pero quizá acabe haciéndose hueco en el mercado. Como juego de móviles puede cumplir. En PC creo que le falta un salto más para superar al resto de propuestas… o por lo menos mantenerse a la altura en cuanto a calidad.

Y como siempre me gusta avisar con los «juegos gacha»: tened precaución aquellos que sintáis debilidad por los sistemas de monetización parecidos. Cada uno puede hacer lo que le venga en gana, pero en mi opinión no vale la pena gastar dinero real si solo queréis disfrutar la experiencia de juego.