Warcraft III Reforged gran oportunidad desperdiciada

Hace poco hemos tenido este importante lanzamiento. Desde luego, ha sido de lo más polémico de los últimos años por parte de la comunidad de jugadores, y yo también considero a Warcraft III Reforged una gran oportunidad desperdiciada. Razones no faltan para quejarse, aunque como siempre, el odio de la gente hace agrandar lo malo e ignorar lo positivo. Esto ya es una costumbre en el mundo de los videojuegos, así que de momento es lo que hay.

Aquí voy a dar mi punto de vista en ambos lados y una vez concluido el juego, que sin tener novedades en su desarrollo jugable, sí había que comprobar personalmente como se comportaba esta nueva versión y lo que podía ofrecer de verdad a la comunidad.

Lo mejor

• La historia es de lo mejor y la responsable del posterior éxito de World of Warcraft, pues de aquí nació todo. Personajes inolvidables, tramas épicas, escenarios memorables… Todo con un buen lavado de cara gráfico que hace las delicias al jugador veterano y convierten la experiencia en viable para el nuevo que nunca pisó el original por su aspecto visual.
• Su jugabilidad se mantiene tan genial como de costumbre, con sus múltiples opciones estratégicas y su excelente campaña. Warcraft III siempre fue un título muy divertido y este Reforged no toca sus mecánicas, lo cual es positivo.
• Su duración; es un juego muy largo y de gran calidad ya solo con su campaña. No vas a apartar este Reforged pronto si quieres disfrutar de toda la experiencia para un jugador. Si algún día llegan a arreglar del todo el multijugador, entonces las horas simplemente se pueden ir al infinito.
• La inclusión de logros en forma de retratos para el perfil. No solo por los logros multijugador al ganar partidas, si no por completar la larguísima campaña de un jugador en sus diferentes dificultades. Esto puede motivar a muchos a completarla e incluso poner el reto máximo, cuando antes ni se lo habrían planteado.

Lo peor

• El multijugador ha implosionado de forma inexplicable. Errores, caídas, alteraciones a la experiencia original de las partidas normales y cambios en las políticas para los creadores de mapas. No todos los antiguos contenidos funcionan correctamente… en general, un caos y lo peor del título sin lugar a dudas. ¿Lo irán arreglando? Según comunican, sí, pero hasta que no se vean resultados, lo mejor es que los interesados aguarden.
• El rendimiento fuera de las partidas, como en su launcher, es mediocre. Una vez jugando todo marcha perfectamente y yo no he sufrido bugs de ninguna clase, pero antes de entrar va lento o a saltos. Bastante fastidioso y algo no muy comprensible a estas alturas.
• Los recortes, especialmente en el incremento de la experiencia visual para un jugador. Ni cinemáticas rehechas, ni cutscenes revisadas o mejor implementadas como se mostró en la Blizzcon. No te lastra la experiencia, pero se nota que podría haber sido muchísimo mejor a nivel visual y de inmersión. Ese brillo de color cantoso en cutscenes…
• Sin cambios para adaptarse a la historia de World of Warcraft actual, con todo lo que eso conlleva. Para la trama original ya tenemos el juego base, pero esta era una oportunidad excelente para arreglar muchos de los sinsentidos argumentales con relación a ambos juegos y las licencias que se tomaron en el MMORPG. Temas como por ejemplo el de Illidan podían haberse arreglado. Sin ser una mala historia ni mucho menos, la del título antiguo no pega para nada con lo visto en WoW, y así otros detalles como lo de Muradin… suma y sigue.

Conclusiones

Warcraft III es y siempre será uno de los mejores juegos de su género, un icono en la industria en general. Aquí tenemos una opción sólida para revivir su historia si solo buscas esa experiencia. Si te gusta el mundo de Warcraft y nunca has vivido la campaña de este título, esta versión es la mejor para disfrutarlo.

Por el contrario, si quieres experimentar su faceta multijugador o te atrajo en su momento por ella, yo recomiendo darle un tiempo para ver si acaba haciéndose viable esta opción y de paso baja el precio del propio juego.

Una enorme oportunidad desperdiciada de Blizzard para volver a poner en la cima a uno de los juegos responsables de su éxito. Dejando la lluvia de críticas negativas a un lado, no se explica el accidentado desarrollo y lanzamiento de este Reforged. Pero pienso que darle vueltas es perder el tiempo.

A la espera de que la compañía arregle los fallos del multijugador y sus distintas opciones, si es que sale bien, esto es lo que tenemos. Una pena, pero no todo es malo si, como es mi caso, solo querías jugar offline o era esto lo que más te interesaba.