The Dungeon of Naheulbeuk: The Amulet of Chaos

Hoy dedicaré la entrada a un nuevo indie jugado por Steam que me ha sorprendido muy gratamente. En este caso del género RPG de batallas tácticas: The Dungeon of Naheulbeuk: The Amulet of Chaos, de Artefacts Studio. Sí, el nombre es largo y quizá no es la mejor elección para que quede en la mente del jugador. Sin embargo, tras esto se esconde una aventura jugable muy interesante que satiriza el mazmorreo clásico de franquicias como Dungeons & Dragons.

A simple vista puede parecer algo sencillo y su precio base es capaz de desmotivar a algunos. Pero en realidad es un título divertido y con mucho contenido para entretener unas cuantas horas. De hecho, mi primera partida ha sobrepasado las 30 y ser completista da para más.

Profundicemos en este bonito calabozo.

¡Breve análisis en vídeo! Así lo veis en movimiento

Ambiente de mazmorra

Lo primero que llama la atención es claro: su estética. Los personajes cuentan con geniales diseños «cartoon» y su aspecto no deja de superarse según avanzas en la historia y vas mejorándoles el equipo. También están muy bien conseguidos los enemigos, todos con una pinta divertida y buenas animaciones que consiguen hacer gracioso hasta el gesto más simple. Para rematar lo visual con buena nota, tenemos distintos tipos de entornos y criaturas, más aún tratándose de un indie. Al principio parece que solo encontraremos trasgos, pero para nada es así: ¡hay más monstruos!

Contamos con buena música para ambientar y sumergirnos en la cómica trama, pero lo que más destaca es la interpretación de los actores en inglés. Protagonizan la historia unos personajes de personalidad muy característica y los encargados de darles voz rinden a un gran nivel con ellos. Todo eso no hace más que sumar y sumar a la experiencia para que resulte agradable, mejor aún para quien suela merodear por este tipo de juegos de rol.

Su mayor «defecto» es que los textos están inglés. Quien no domine el idioma no podrá disfrutarlo bien, ya que leer es importante. No solo es un juego muy profundo en sus mecánicas jugables y es importante entender las habilidades. Uno de sus mejores puntos es el sentido del humor. Si no se entienden los textos, pierde toda la gracia. Literalmente. (Actualización: ¡lo han traducido al español! Por lo menos en PC desde el 8 de abril)

Un genial grupo de protagonistas con serios problemas

Atrapados en Naheulbeuk

La historia tiene una base simple, pero que a su vez funciona muy bien. Nuestro pintoresco grupo de protagonistas se encuentra, por cosas del destino, atrapado en la mazmorra de Naheulbeuk tras encontrar un amuleto maldito. Deben buscar una solución para librarse de su oscuro destino y huir del enorme edificio. Toda la trama sucederá en este lugar y sus distintas plantas, que por cierto son más de las que vemos marcadas en un principio. Por el camino encontrarán aliados… pero especialmente enemigos, trampas, puzles y tesoros.

Mientras recorremos cada zona con nuestro grupo resolviendo la misión principal iremos topándonos también varias tareas secundarias. Estas nos otorgarán oro, experiencia y objetos. En general son pequeñas historias que cuentan locuras sobre los sucesos ocurridos en Naheulbeuk y están llenas de referencias al género de rol. Sin ir más lejos, en una misión debemos ayudar a un una imitación de Minsc a encontrar a su ratoncito gigante del espacio en miniatura.

Como este guiño a Baldur’s Gate encontraremos varios que satirizan las aventuras y situaciones de mazmorreo más clásicas. Otra que se me ocurre ahora mismo es una situación semejante a la vivida en Orzammar con los enanos y los engendros tenebrosos, representada aquí a su manera.

Quizá no nos cuentan una historia épica con giros increíbles, pero el tono cómico de la obra y sus extraordinarios protagonistas nos hacen pasar un buen rato del primer momento al último. No es un humor forzado y será fácil estar mínimo con una sonrisa mientras vivimos la aventura. Y además podemos tomar algunas decisiones durante las misiones, con resultados graciosos e inesperados.

El ogro abre caminos a su manera

Protagonistas

El característico grupo que protagoniza la historia se encarga de satirizar cada uno de los arquetipos de clases y razas del género. Sus personalidades están muy marcadas, exagerando ciertas facetas de cada uno para hacerlos más divertidos y estrafalarios. No por nada sus nombres son ejemplos básicos como «la Elfa«, «el Enano» o «el Bárbaro«. Las interacciones y actitudes entre ellos son graciosas, desbordando carisma y haciéndote querer acompañarlos toda la partida.

En total llevaremos a siete personajes a la vez, con la posibilidad de que sean ocho bastante temprano en la partida. La mayoría tiene también su propia función fuera de combate, tanto por utilidad a la hora de explorar como por historia. Poniendo un par de ejemplos prácticos, el Pícaro desactivará trampas y el Ogro podrá abrir caminos bloqueados con su fuerza bruta. En cuanto a la trama, la Hechicera será la encargada del mapa y los libros, además de traducir las palabras del Ogro. El Explorador es el supuesto líder del grupo y no tardaremos en descubrir lo poco capacitado que está para ello, encabezando la característica torpeza de todos los protagonistas en general.

En mi opinión, son brillantes y el máximo atractivo del juego a nivel argumental. Viviremos todo tipo de situaciones extrañas y siempre es interesante ver como reaccionan frente a cada desastre.

El avaricioso enano expone los problemas de añadir un miembro al grupo

Progresión de personajes

En combate, nuestros protagonistas tendrán su rol está muy bien marcado. Aun así, tendremos la opción de personalizar sus talentos a nuestro gusto para adaptarlos a varias situaciones a medida que subamos nivel. Su función básica es sencilla de entender a simple vista: la Elfa será nuestra arquera y podemos potenciar su daño a distancia. Pero también existe la posibilidad de que aprenda habilidades de apoyo para complementar su utilidad. Lo mismo pasará con la Hechicera o con la versatilidad del Explorador a la hora de convertirlo en un guerrero de vanguardia o un atacante de largo alcance… y así con todos. La personalización es un buen incentivo y obliga a que pensemos mejor la forma de combinar las habilidades de cada personaje para compensar posibles carencias.

Conviene recordar que en cierto momento de la partida podremos incluir a un protagonista más con sus propios diálogos y rol específico en combate. Y sinceramente, es difícil elegir entre los tres extra: la Paladina, la Sacerdotisa y el Bardo. O ninguno, y seguir solo con los siete originales. Sin embargo, dependiendo de la dificultad que escojamos, quizá prefiramos basar nuestra elección en su utilidad para el grupo. Creo que el juego está bastante bien equilibrado y cualquier opción se demuestra válida, por lo que incluso optando por nuestro favorito podremos superar los retos que nos plantean.

No solo subimos de nivel y distribuimos puntos de características y talentos. La parte de equipar a nuestros protagonistas es esencial a la hora de fortalecerlos, por lo que será inteligente explorar bien la mazmorra para encontrar sus tesoros ocultos. De la misma forma, por Naheulbeuk existen distintos vendedores con equipo útil, pero será caro y el oro no sobra hasta avanzada la partida. Esto quiere decir que, si realmente deseamos afrontar un desafío de nivel alto, será recomendable investigar cada rincón en busca de equipo y dinero para estar lo más preparados posible.

La apariencia de nuestros protagonistas cambia según lo que les equipes

Grandes batallas

Por muy bonito que sea dar vueltas por la mazmorra de Naheulbeuk, el verdadero atractivo de la jugabilidad se centrará en combate. Podría no parecerlo, pero estaremos ante un sistema de batalla táctico bastante profundo. Afortunadamente el título nos presenta y enseña muy bien su fórmula con un excelente tutorial, dejándonos tras eso escoger entre varios niveles de dificultad. El modo normal nos ofrece un desafío moderado, pero subirlo un poco más nos dejará ver un gran reto a medida que avanzamos por la historia.

Las verdad es que las batallas son muchas y muy variadas, trasladándonos perfectamente a esas partidas de rol de mesa o virtuales de Dungeons & Dragons y sus derivados. Esto incluye los benditos y recurrentes críticos, tanto para beneficiarnos como para perjudicarnos. No serán pocas las ocasiones en las que nuestra estrategia se va al traste por culpa de un fallo crítico que no solo hará fracasar nuestra maniobra, si no que perjudicará al propio personaje con daño o algún estado alterado. Para compensarlo, el juego incluye un sistema que va acumulando tus fallos. Tras unos cuantos, se llena una barra que te permite utilizar ciertos beneficios para solucionar un poco el lío.

En niveles de dificultad altos, las «pifias» pueden ser un problema bien grande si se repiten mucho. Aun así, hay que admitir lo divertido que resulta ver a los personajes haciendo gala de su torpeza gracias al fuego amigo involuntario o a los resbalones accidentales. Al fin y al cabo, pegan mucho con el tono de humor del juego.

Hasta unos pocos libros pueden ser peligrosos

Estrategia ante todo

Las batallas no serán encuentros aleatorios, pues sucederán tras cada conversación o evento. Cuando ocurran, veremos que están divididas en dos fases claramente diferenciadas.

En primer lugar tenemos la fase de preparación, donde te asignan un área para que sitúes los personajes del grupo a tu gusto según la situación de los enemigos, que habrán hecho lo mismo automáticamente. Puedes examinarlos para obtener más información de ellos y colocar a tus unidades en consecuencia. También existe la posibilidad de gestionar un poco el inventario o tomar pociones, todo ello antes de darle a «¡Combatir!» cuando estés listo.

En la segunda fase, disputaremos el combate por turnos. Existen muchas opciones en combate, pues habrá coberturas para protegernos un poco del daño, las típicas áreas de fuego u otras sustancias, trampas y objetos arrojadizos, empujones, estados alterados… Todo lo que ya es familiar para cualquiera que frecuente algún RPG táctico. El posicionamiento y el control del escenario son una parte clave en la victoria de nuestro grupo… o la derrota del mismo.

Las clásicas arañas monstruosas no iban a faltar

Valoración final

85/100

Este The Dungeon of Naheulbeuk: The Amulet of Chaos es sencillamente una joya que no me esperaba para nada. Una experiencia muy divertida para los fans del típico rol occidental, donde nos sacarán alguna que otra sonrisa con sus divertidos personajes mientras plantean desafíos interesantes. Tras tener un pequeño retraso en su lanzamiento, ya lo tenemos desde el día 17 por Steam. Si te gusta la jugabilidad de los RPG de batallas tácticas por turnos al estilo Divinity Original Sin 2 o Blackguards, esto te encantará. Y si seguías la serie de audios francesa en la que se basa, imagino que mucho mejor.

Yo no puedo dejar de recomendarlo, especialmente a los amantes de franquicias como Dungeons & Dragons. Incluso incitaría a probarlo a gente que le agrade la ambientación pero que no le guste el estilo de combate táctico por turnos. Personalmente no tengo por preferencia ese sistema de batallas, pero cuando está bien implementado y es divertido… no queda otra que disfrutar.