Jon Irenicus el villano por excelencia de Baldur’s Gate
Cerca de finalizar el año 2000 se puso a la venta mi videojuego favorito, al que considero el mejor en su género: Baldur’s Gate II Shadows of Amn. Hasta tal punto que incluso hoy en día, casi veinte años después, sigo disfrutando. Si bien el título posee multitud de virtudes a destacar, aquí me centraré en una de sus claves para su éxito. Explicaré por qué Jon Irenicus es el villano por excelencia de Baldur’s Gate
En toda historia, una de las piezas más importantes es el antagonista. Son él, ella o ellos por lo general quienes mueven la trama y dan sentido a la aventura que viven nuestros héroes o protagonistas. Y aquí BioWare no falló – SPOILERS.

Trasfondo
Durante la partida existen algunos fragmentos de su diario personal o anécdotas que nos cuentan ciertos personajes relacionados con él. Las que mejor nos explican su trasfondo son Demin, la sacerdotisa de Rillifane, y la reina Ellesime.
Irenicus no siempre fue como lo conocemos, ni siquiera tenía ese nombre. Antes era Joneleth, un talentoso hechicero elfo de Suldanessalar que había logrado alcanzar las cotas de poder más altas. Estaba enamorado de Ellesime y parecía feliz junto a ella. Pese a ello, no estaba conforme con eso y aspiró a algo mucho mayor: alcanzar la divinidad. Se rumorea que fue influenciado por su hermana Bodhi, alguien menos relevante y estable que él, pero solo ellos sabrán la verdad que motivó todo.
Los dos hermanos elaboraron un maquiavélico plan para absorber el poder del Árbol de la Vida de Suldanessalar, para así trascender y convertirse en entidades superiores mediante un sacrílego ritual. Los detuvieron antes de lograr su propósito, sin embargo el daño ya estaba hecho: la profanación del sagrado lugar hizo mucho daño al pueblo élfico. La catástrofe alteró su conexión con la naturaleza y dejó en grave peligro a los ciudadanos.
Fue la propia reina Ellesime la encargada de juzgarlos y les impuso el castigo que creyó más severo por su grave crimen. No solo los desterró a ambos de la ciudad, si no que utilizando el poder del Seldarine (los dioses élficos) les arrancó cualquier conexión con su raza. De esta manera los volvió semejantes a los humanos, con una vida que ahora no duraba más que la de estos últimos y privados sus espíritus del paraíso al que todo elfo tenía derecho. Ingenuamente, la dolida líder pensó que eso era peor que la muerte y que quizá de tal manera lograría que valorasen lo perdido. Su esperanza consistía en que se arrepintiesen y con el tiempo se reformasen. Lo único que consiguió fue crear a Irenicus.
Se descubre que, de hecho, Jon Irenicus se sentía profundamente desdichado con esa maldición. Condenado y vacío por dentro, ni siquiera su antiguo amor por Ellesime podía aliviarle. Y no fue porque no lo intentara mediante clones y experimentos de todo tipo. Se acabó llenando con ansias de venganza contra el Seldarine y Suldanessalar, y un deseo de poder aun mayor del que tuvo antaño.
Mientras que su hermana Bodhi recurrió al vampirismo para contrarrestar su dolencia, él buscó una solución alternativa: el hijo de Bhaal.

Baldur’s Gate: Siege of Dragonspear
Irenicus descubre todo lo relacionado con la historia de Bhaal y se fija en uno de sus vástagos, el hijo adoptivo de Gorion. Este se vuelve relevante tras liberar la ciudad de Puerta de Baldur del tirano Sarevok, ganándose así la atención e interés de Jon.
Podemos ver al hechicero encapuchado siguiendo e inquietando al protagonista durante su cruzada contra Caelar Argent en Siege of Dragonspear. Según dice, está evaluándolo y comprobando si es adecuado para sus propósitos. Se mantiene como una figura misteriosa y peligrosa, pues no revela su identidad y aparece en cualquier lugar marchándose cuando le viene en gana, demostrando así que no existen impedimentos para él a la hora de acercarse al grupo.
No interviene directamente en los acontecimientos hasta finalizar la trama, cuando el hijo de Gorion regresa triunfal del Infierno tras resolver el conflicto con Caelar. Irenicus intenta manipular al héroe para que asesine a Skie y, al no lograrlo, la mata él mismo y manipula la situación para que encuentren al protagonista en el lugar de los hechos, con lo que consigue que lo culpen erróneamente.
El héroe de Puerta de Baldur es arrastrado de vuelta a la ciudad como un criminal y encerrado en prisión a la espera de ser ejecutado. Con todo en contra, el hijo de Gorion escapa de ese destino y huye de la ciudad con sus compañeros más fieles. Lo que no sabía es que no se irían muy lejos: los hombres de Irenicus aguardaban en las afueras vigilando sus movimientos y acaban capturando a todo el grupo durante la noche.

Baldur’s Gate II: Shadows of Amn
Jon empieza fuerte como villano en su entrega. En algún momento hace que asesinen a Dynaheir y encierra en sus mazmorras bajo Athkatla al protagonista y a todo su grupo: Imoen, Jaheira, Khalid y Minsc. Una vez allí, utiliza a Khalid en su experimento con Imoen hasta acabar matándolo y tortura a esta última y al protagonista. El tormento se ve interrumpido por un ataque a su guarida de mano de los Ladrones de las Sombras del que tiene que hacerse cargo personalmente. Ese momento es el que aprovechan sus víctimas para huir de la mazmorra.
El combate del villano contra los ladrones llega a la superficie, derrumbando parte del Paseo de Waukeen bajo el que se encontraban. Los Magos Encapuchados, déspotas de la seguridad mágica en Athkatla, se ven obligados a intervenir y tratan de reducir a Irenicus. Sin embargo, ni la fuerza de ambas facciones es rival para el hechicero, que los despacha a todos sin esfuerzo según van viniendo. Para no agravar la situación, lo que hace es aprovechar y parar de resistirse, dejándose capturar por los Magos Encapuchados. Esto lo hace con la condición de que se lleven también a Imoen. La chica había utilizado magia contra Jon durante el asalto, así que no cuesta nada que los guardianes arcanos accedan. Acaban apresándolos a ambos sin que el protagonista ni su grupo puedan hacer nada para evitarlo.
Continúan los experimentos
Una vez en la Prisión del Hechicero de la isla de Brynnley, sitio donde encierran a todos los magos criminales o sospechosos de serlo, Irenicus no se encuentra ni mucho menos confinado. Se libera fácilmente de sus captores y toma el control del lugar. Desde allí, esperando a que el hijo de Gorion acuda a él para liberar a Imoen o por venganza, utiliza el tiempo para seguir torturando a la joven y experimentar con ella para extraer su esencia, ya que ella es también una hija de Bhaal.
Consigue su propósito y le arranca el alma divina a la muchacha, otorgándosela a su hermana Bodhi. Cuando el protagonista llega, cae en su trampa y ejecuta el mismo proceder, tomando su alma para él mismo. Con su objetivo conseguido y tras un feroz combate donde tiene que lidiar con todos los magos locos de la prisión y el grupo de héroes, decide escapar de ahí para continuar con el segundo paso de su gran plan: la venganza contra los elfos.
Descartando al hijo de Bhaal ya como posible amenaza, Jon se encamina a la Infraoscuridad, concretamente a la ciudad de Ust Natha. Allí hace tratos con los elfos oscuros y su matriarca más influyente, Ardulaz. Se demuestra que su alianza no es sincera y solo los está utilizando, pues cuando unos elfos de Suldanessalar prisioneros allí lo reconocen, Irenicus se ocupa de liquidarlos rápidamente para que no revelen su procedencia. De esta forma, incita a los drow a salir a la superficie y aliarse con su propio ejército de súbditos y demonios para guerrear con los elfos de Suldanessalar.
Los planes frustrados
Mientras ocurren los destrozos y su vendetta contra su antiguo pueblo se produce, él utiliza ese conflicto para capturar a Ellesime e iniciar el ritual que en su día probó: absorber la energía del Árbol de la Vida. Su objetivo de convertirse así en un dios para unirse al Seldarine casi se cumple… Pero por segunda vez es interrumpido, en esta ocasión por el hijo de Gorion y sus compañeros. Irenicus está debilitado, tanto por el ritual como por los estragos que ya le estaba causando el alma divina robada, así que acaba cayendo ante sus enemigos.
A pesar de ello, no murió del todo. Por la esencia divina robada, su espíritu fue llevado al Infierno y arrastró con él al vástago de Bhaal y a los suyos. Es allí donde se disputaría el combate final por ver quien volvería al mundo de los vivos y quien quedaría sepultado en ese páramo maldito. Un enfrentamiento que Jon pierde, con lo que su persona es engullida entre la lava y las tenebrosas criaturas que habitan la zona, desapareciendo para siempre.

Conclusiones
Aquí tuvimos un villano con todas las letras y en mayúsculas. Una construcción perfecta en lo argumental y lo jugable. Esa actuación sublime cada vez que aparecía en escena (y más para la época). Acabando con una ejecución general que supo marcar a todos los que sufrieron su acoso a lo largo de las partidas a Baldur’s Gate II.
Este odioso antagonista se hizo un hueco enorme en la historia de los videojuegos, en especial del ámbito de Dungeons & Dragons. Incluso algunos fans crearon mods para el juego original donde podíamos tenerle de compañero en la expansión Throne of Bhaal, a lo Sarevok.
Estamos en una época en la que el concepto de los villanos buscando la inmortalidad y la divinidad ya está más que explotado. Puede que hoy no brille tanto Jon Irenicus como debería. Sin embargo, seamos sinceros: en su momento fue una pasada. Su historia está vinculada a la del hijo de un dios, así que su trama y objetivos eran totalmente lógicos dada su personalidad y circunstancias. Su presencia y poder imponían respeto y miedo. La superioridad frente a sus rivales estaba bien justificada y su caída es adecuada para alguien como él.
Ese trasfondo de su relación romántica con Ellesime es interesante. También lo de que ella tenía esperanza en su redención para amarlo una vez más. Aparte de esos detalles, está el hecho de que nunca sabremos la verdad exacta. Si Joneleth ya era así en parte o fue totalmente corrompido por su hermana Bodhi. Da para ejercitar la imaginación.
Hay que resaltar además el buen trabajo de los actores de voz que le dieron vida en su versión inglesa y en la española… aunque esta última no se haya trasladado a la Enhanced Edition de Beamdog. Una lástima.